Introducción
El pato a la pekinesa es un exquisito plato de la cocina china que se ha vuelto popular en todo el mundo. Esta preparación, originaria de la región de Pekín, se destaca por su textura crujiente por fuera y su carne jugosa y sabrosa por dentro. Aunque su nombre sugiere que se utiliza pato, es posible encontrar variantes que emplean otras carnes, como el pollo. Sin embargo, en este artículo nos centraremos en la versión tradicional con pato.
Origen e historia
El pato a la pekinesa tiene una larga historia que se remonta a más de 600 años atrás, durante la dinastía Ming. Durante este período, la corte imperial de Pekín era conocida por su refinada cocina, y el pato jugaba un papel importante en sus festines. El proceso de preparación del pato a la pekinesa se ha perfeccionado a lo largo de los siglos, convirtiéndolo en un plato emblemático de la gastronomía china.
Preparación
La preparación del pato a la pekinesa es un arte en sí mismo. El pato se cocina en un horno especial, donde se asa a fuego lento durante varias horas. Antes de ser cocido, se infla el cuello del pato con aire para separar la piel de la carne, lo que le da su característica textura crujiente. Luego se cubre con una mezcla de miel y especias, y se continúa asando hasta que la piel se vuelve dorada y crujiente.
Servicio
El pato a la pekinesa se sirve tradicionalmente en rodajas finas, acompañado de salsa hoisin, crepes de trigo, cebollinos y pepinos en juliana. Para disfrutarlo, se toma una crepe de trigo, se coloca una rodaja de pato en el centro, se añaden algunos cebollinos y pepinos, se agrega un poco de salsa hoisin y se envuelve todo como si fuera un taco. El resultado es una explosión de sabores y texturas en cada bocado.
Popularidad y variaciones
El pato a la pekinesa ha ganado popularidad en todo el mundo, convirtiéndose en un plato icónico de la cocina china. Muchos restaurantes especializados en comida asiática incluyen esta delicia en sus menús. Además, se han desarrollado variaciones de esta receta, como el pato a la pekinesa con piña o con naranja, que añaden un toque de frescura y acidez al plato.
Conclusión
El pato a la pekinesa es un plato que combina técnicas culinarias refinadas con sabores exquisitos. Su popularidad se debe a su textura crujiente y su carne jugosa, así como a la combinación perfecta de ingredientes en cada bocado. Si tienes la oportunidad de probarlo, no dudes en hacerlo, ¡no te arrepentirás!